Buenos días!!!
hace un par de semanas fue el cumpleaños de un amigo, y me encargó una tarta… de que temática?
Si os digo… Vamos con afán, todos a la vez…. seguro que ya sabéis de que se trata.. Pues de bola de dragón, claro que si, creo que para la mayoría de treintañeros bola de dragón marcó su infancia… así que en ella no podía faltar Goku, y las siete bolas de dragón.
Eligió una tarta de sabor limón, gran elección, así que os cuento como la hice.
Los ingredientes para el bizcocho son:
250 gr de harina
200 gr azúcar
3 huevos
100 ml aceite de girasol
1 yogur de limón
16 gr de levadura
1 limón (ralladura)
Bueno pues lo primero que hay que hacer, es precalentar el horno, a 180 grados.
Batimos los huevos junto con el azúcar, podéis hacerlo a mano con unas varillas, o con el robot de cocina, o como queráis, yo lo hice a mano.
Añadimos el yogur y mezclamos bien con la varillas.
Seguidamente añadimos el aceite y volvemos a mezclar.
Ahora rallamos el limón, solo la parte amarilla, sin llegar a lo blanco, que entonces amarga, y lo añadimos también y mezclamos. Si queréis también podéis añadir aroma.
Ya solo falta añadir la levadura y la harina, lo hacemos poco a poco y es importante que estén previamente tamizadas para que no nos queden muchos grumos. Vamos batiendo hasta que quede una masa homogénea, sin grumos.
Ahora con un pincel de silicona y un poco de aceite, o spray desmoldante, engrasamos nuestro molde. Ya esta listo para llenarlo con la masa y al horno. Mínimo necesitará unos 40 minutos de horneado, dependerá de vuestro horno.
Mientras se hornea vamos preparando la buttercream, también de limón, y para ello necesitamos los siguientes ingredientes.
250 gr de azúcar glass
100 gr de mantequilla
2 cucharadas de leche
ralladura de limón
Con estas cantidades me salió la buttercream justa para rellenar el bizcocho y cubrirlo por fuera con una capa fina para poder cubrirla con fondant, si vuestra idea es decorarla con buttercream pues tenéis que añadir más cantidad.
Esto si que lo hacemos con el robot de cocina, a mano es muy complicado conseguir la textura correcta.
Lo primero que hacemos es batir la mantequilla, muy importante que todos los ingredientes estén a temperatura ambiente.
Añadimos el azúcar glas poco a poco y previamente tamizado, importantísimo tamizar el azúcar, para que no queden grumos.
Añadimos la leche y la ralladura de limón al gusto, yo fui echando y probando hasta que conseguí el sabor deseado.
Cuando la tengamos lista, la pasamos a una manga pastelera. Yo use una boquilla de estrella, pero eso no tiene mucha importancia en esta tarta porque va a ir cubierta de fondant.
Utilicé la manga para poner la buttercream entre los bizcochos y en la capa de arriba, los laterales los extendí con una espátula.
Pues este es el aspecto del bizcocho al salir del horno.
Lo dejamos enfriar unos minutos antes de desmoldar, para que no se desmigue. Con una lira calculé a qué altura iba a cortar el bizcocho y con cuidado para que no se desmigue lo vamos cortando. Ahora solo falta cubrirlo y rellenarlo de buttercream y a decorar.
Yo la forré con fondant blanco y después la pinté con aerógrafo, con colorante azul, ya hacía tiempo que no lo usaba y me apetecía.
Las bolas de dragón también las pinté con aerógrafo, para que tuvieran ese toque entre amarillas y naranjas y las estrellas las hice con un stencil.
A Goku le puse sobre la nube, que la hice enrollando tiras de fondant y juntándolas. También está pintada con aerógrafo, ya que estábamos puestos…
Me hubiera gustado poder dedicar más tiempo al modelado de Goku, para hacerle más detalles, pero en las fechas que pilló, en plenos días navideños fue imposible sacar ni un minuto más. Pero bueno, este es el resultado.
Bueno pues espero que os haya gustado esta tarta, que también lleva un poquito de mi infancia. Yo por lo menos he disfrutado haciéndola y la he puesto mucho cariño. Felicidades amiguitooo!!!
Hasta la próxima y have a sweet day.