La receta perfecta para los que sueñan con el sabor de un Donuts… ¡en forma de
helado!
¿Quién puede resistirse al sabor de un buen donut? Su aroma, su textura suave, ese
punto de vainilla con un toque de canela y glaseado… ¡Una delicia de las que se
recuerdan con una sonrisa! Y como en Dulcemisú nos encanta convertir los antojos en
recetas, hoy te enseñamos a preparar helado sabor Donuts, con una textura cremosa y
un sabor tan auténtico que parecerá magia. Además, usaremos nuestro precioso molde
de helados con forma de donuts de Lékué, que puedes encontrar en nuestra tienda,
para darles ese look tan divertido y apetecible.
La receta es súper fácil y solo necesitas unos pocos ingredientes clave: nata vegetal
Ambiante, que da una cremosidad espectacular y se monta de maravilla; azúcar
invertido, para mantener los helados suaves incluso después de congelarlos; y por
supuesto, aroma de sabor Donuts (también disponibles en Dulcemisú en
varias marcas y tamaños).
Así que ponte el delantal, prepara tu manga pastelera y ¡vamos a crear helados que te
van a robar el corazón!
Ingredientes (para unos 6 helados)
• 250 ml de nata vegetal Ambiante muy fría
• 40 g de azúcar invertido
• 1 cucharada colmada de aroma de sabor Donuts
• Cobertura de chocolate (opcional)
• Toppings: sprinkles, galleta triturada, crocanti…
• Molde de donuts de silicona Lékué
Paso a paso:
1. Monta la nata Ambiante
Saca la nata del frigorífico bien fría y bátela con varillas eléctricas hasta que quede
firme pero con textura cremosa. No necesitamos una nata súper montada, solo que tenga
cuerpo. La nata vegetal Ambiante es ideal porque tiene una estabilidad maravillosa, no
se corta y mantiene la textura incluso congelada.
2. Incorpora el azúcar invertido
Añade el azúcar invertido y mezcla suavemente con una espátula o varillas a baja
velocidad. Este ingrediente es mágico: no solo da dulzor, también evita que el helado
cristalice y le aporta una textura más elástica y sedosa al congelarse.
3. Añade la pasta de Donut
Llega el momento del sabor. Incorpora una buena cucharada de aroma sabor
Donuts. Mezcla con movimientos suaves y envolventes hasta que la crema tenga un
color uniforme y un aroma irresistible.
4. Rellena el molde Lékué
Coloca la mezcla en una manga pastelera y rellena las cavidades del molde de donuts
de Lékué. Así evitas burbujas de aire y te aseguras de que queda bien repartida. Alisa la
superficie con una espátula y coloca los palitos.
5. Congela con mimo
Lleva el molde al congelador durante al menos 4 horas, o hasta que los helados estén
completamente firmes. Puedes prepararlos por la noche y dejarlos listos para decorar al
día siguiente.
6. ¡A decorar!
Desmolda con cuidado y, si quieres darles un acabado aún más irresistible, báñalos con
chocolate fundido y añade sprinkles de colores, crocanti o galleta triturada por encima.
Te quedarán como auténticos donuts helados recién salidos de una pastelería… ¡pero
caseros!
Consejito Dulcemisú
Puedes preparar una base más grande y dividirla en varios sabores. Por ejemplo: mitad
de la mezcla con pasta de Donut y la otra mitad con pasta de vainilla o caramelo. ¡Así
tienes variedad sin esfuerzo!
Variaciones para soñar despierta:
• Usa cobertura rosa de chocolate blanco teñido para un look “donut glaseado”
clásico.
• Añade mini trocitos de donut dentro de la mezcla para una sorpresa al morder.
• Decora con glasa real endurecida y crea imitaciones de donuts de panadería.
• Acompáñalos con salsa de caramelo salado al servir.
Un molde que enamora
El molde para helados con forma de donuts de Lékué es una joya de la repostería
creativa: flexible, antiadherente, fácil de desmoldar y con un diseño súper tierno. ¡No
solo sirve para helados! Puedes usarlo también con bizcocho, mousse, gelatina,
bombones y más. Y lo mejor: viene con palitos reutilizables incluidos. Lo tienes
disponible en nuestra tienda online… y cuando lo pruebes, ¡te aseguro que no querrás
otro!
¿Te ha gustado esta receta? Si la preparas, no olvides compartir tu foto en Instagram y
etiquetarnos. Nos hace muchísima ilusión ver vuestras creaciones. Y si aún no tienes tu
molde de donuts… corre a por él, porque el verano es para disfrutar de cosas dulces,
bonitas y caseras.
