¿Hacemos unos originales macarons de araña?
¡Ya está cerca Halloween! Esta fiesta de orígenes celtas, está fuertemente arraigada en Estados Unidos y Canadá y cada vez es más popular aquí, en España. La tarde-noche del 31 de Octubre, ya podemos ver a niños disfrazados con sus padres por nuestras calles pidiendo “truco o trato”. Así que, ¿con qué tenéis pensado endulzar Halloween?
Si todavía estáis indecisos, nuestra propuesta son unos macarons de araña. ¡¡¡¡Terroríficos!!!!
Los ingredientes que necesitáis para los macarons de araña son:
2 claras de huevo a temperatura ambiente (65 gr aproximadamente)
80 gr de almendras molidas
120 gr de azúcar glas
40 gr de azúcar
Colorante extra negro
1 cucharada de aroma en pasta de regaliz
Para el relleno:
1 hoja de gelatina neutra
1 ½ vaso de agua (350 ml aproximadamente)
½ cucharadita de aroma en pasta de regaliz
1 cucharada de colorante rojo
1 cucharada de azúcar
Para la decoración:
Fondant blanco
Fondant rojo
Regaliz negro (El clásico de toda la vida, el de las chuches)
Y ahora sí, vamos paso a paso a preparar estos terroríficos macarons de araña.
En medio vaso de agua añadimos la hoja de gelatina y la tendremos en remojo unos cinco minutos.
En el bol de la batidora de varillas echamos las claras.
Batimos las claras y cuando empiecen a formarse las burbujas añadimos el azúcar, el colorante y el aroma de regaliz en pasta.
Continuamos batiendo hasta conseguir que estén a punto de nieve. Para comprobar que están bien montadas podemos dar la vuelta al bol con cuidado, si no se caen están perfectas.
Tamizamos la almendra y el azúcar glas, este paso es muy importante para que la textura del macaron sea muy fina, así que mejor, ¡lo tamizamos dos veces!
En el bol donde tenemos el merengue añadimos la harina de almendras y el azúcar glas ya tamizado y con movimientos envolventes y la ayuda de una espátula de silicona mezclamos los ingredientes.
Cuando la masa este homogénea, preparamos la manga pastelera con una boquilla redonda del número 12 y la rellenamos.
En la bandeja del horno, donde previamente hemos colocado papel vegetal para hornear, comenzaremos a colocar los macarons. La manga debe de estar a 90º y la boquilla casi pegada al papel. Para evitar que nos queden con punta es importante dejar de presionar antes de retirar la manga.
Los colocaremos alternativamente para que circule el aire entre ellos. Cuando terminemos con el último macaron, los dejaremos reposar 30 minutos para que hagan una especie de costra.
Mientras reposan los macarons, en un cazo pondremos a cocer el agua con el colorante rojo, el aroma de regaliz en pasta, el azúcar y el medio vaso de agua con la gelatina durante 5 minutos.
En un recipiente antiadherente, vertemos la gelatina para que enfríe.
Mientras esperamos a que se enfríe la gelatina y se cumple el tiempo de reposo de los macarons, vamos ha hacer con el fondant y el regaliz la caracterización de las arañas.
Preparamos 3 bolitas por araña de fondant blanco y 3 bolitas más pequeñas de fondant rojo. Aplastamos las bolitas y pegamos las bolitas rojas sobre las blancas. Con un rotulador de tinta comestible, dibujaremos unas líneas para simular las venitas.
Con fondant blanco, haremos cinco colmillos a cada araña, modelándolos con los dedos en forma triangular.
Pasada la media hora de reposo de los macarons, los metemos en el horno, a media altura a 50 º C, con calor por abajo y por arriba y sin ventilador durante 20 minutos.
Cuando pase el tiempo, subimos el horno a 140 º C y los mantenemos dentro durante 15 minutos, ahora es cuando empezaran a crear la faldita o pie.
Una vez horneados, los sacamos del horno y los dejamos enfriar un par de minutos en la bandeja del horno, antes de sacarlos a la rejilla enfriadora.
Cuando la gelatina esta sólida, la cortamos con un cortador redondo del mismo tamaño de los macarons.
Rellenamos los macarons fríos con la gelatina. ¡Y ya podemos empezar a transformarlos en terroríficas arañas!
Cortamos cuatro piezas de regaliz por macarons, las tiras deben de ser de unos cinco centímetros, y las dividiremos por la mitad.
Colocamos las tiras de regaliz entre las dos capas de macarons, pinchándolos en la gelatina para que se sujeten mejor.
Con pegamento comestible y la ayuda de un pincel, pegamos los tres ojos en la tapa superior del macarons.
Pegamos dos colmillos en la tapa superior y tres en la inferior. ¡Y ya tenemos nuestro temible macarons de araña!
Os animamos a prepararlos, sólo con los ricos que están los mac ya merece la pena, y si le damos un toque Halloween y lo convertimos en macarons de araña, nos quedarán muy rico, originales y terroríficos!!
Have a sweet day!