En nuestro último artículo vimos cómo decorar tartas para Navidad. Unas fechas muy señaladas y bonitas que están a la vuelta de la esquina. Sin embargo, para hacer tartas y pasteles de calidad necesitamos no solo el modo y las recetas para hacerlos. También necesitamos una serie de herramientas de cocina imprescindibles. ¿Alguien cree que podría hacer pasteles sin tener un horno? Está complicado, ¿verdad? Y lo mismo ocurre con la manga pastelera profesional, un utensilio básico a la hora de sumergirse en la repostería.
¿Pero qué es exactamente la manga pastelera? Para quienes no cuenten con mucha experiencia en la repostería y se encuentren aprendiendo e investigando, algo que desde Dulcemisú celebramos con entusiasmo, hablaremos primero de la manga pastelera desechable. Es decir, la manga pastelera de toda la vida. La misma que usaban nuestras abuelas para sus pasteles y sus tartas. En ese sentido, estamos ante un utensilio de cocina conformado por un paño cosido en forma de cono con un pistón sólido con boquilla. Su finalidad es esencialmente decorativa.
En 2007, sin embargo, el famoso repostero Patrick Friggeri desarrolló en Francia la primera manga pastelera de carácter profesional. Una no desechable, sino que cuenta con los distintos elementos en formato plástico para la reutilización constante. Gracias a la rigidez de sus piezas, permite no solo una mayor precisión a la hora de usarla para decorar, sino también mucha mayor comodidad a la hora de montarla, de desmontarla y de limpiarla. Todo cuanto se necesita es un poco de manejo. Te enseñamos cómo usar la manga pastelera.
¿Cómo usar la manga pastelera?
Lo primero que debes hacer es desenroscar el anillo del adaptador de boquillas. Una vez realizado esto, permite que la base de acoplamiento caiga dentro de la manga y empuja hacia la punta de la misma. Marca entonces con una línea justo bajo la rosca del tornillo inferior. Ahora empuja la base de acoplamiento hasta la parte ancha de la bolsa y corta con unas tijeras por la marca que dibujaste. ¿Ya? Pues ahora empuja el acoplamiento de manera que quede encajado en la punta. Coloca la boquilla, coloca el anillo en la punta y gira lo suficiente.
Vale, ya tienes tu manga pastelera de silicona o del material que hayas elegido lista para utilizar. Lo próximo que tendrás que hacer es rellenarla. Es importante no rellenarla hasta rebosar. Una vez vertido el relleno con el que queremos decorar, retorcemos la parte superior de la manda o cerramos con unas gomillas para que quede bien apretadito. Ya solo tendrás que utilizar tu creatividad y tu habilidad moviendo las manos para conseguir el efecto visual que andas buscando. Como todo, requiere un poquito de práctica.
Comprar manga pastelera profesional
Según la leyenda, fue el cocinero francés Marie-Antoine Careme quien inventó la manga pastelera en el siglo XIX. El mismo que inventó el uniforme de cocinero que perdura hasta nuestros días. Al margen del avance que aquel otro francés, Friggeri, le dio en 2007, su esencia es la misma: servir como herramienta de repostería para aportar ingredientes, colores y formas nuevas a los pasteles y las tartas. En ese sentido, un buen repostero debe siempre saber manejar la manga pastelera profesional.
¿Te gustaría iniciarte en la repostería? ¿Ya la manejas, pero no tienes una manga pastelera propia? En Dulcemisú te hemos enseñado acerca de cómo utilizar la manga pastelera, pero también podemos ayudarte a que tengas la tuya propia y practiques tanto como puedas. En concreto, en nuestra tienda online podrás hacerte con todas las variedades de boquillas de manga pastelera, así como mangas enteras. ¿Sabes qué? Será un gran regalo para Reyes. ¿Por qué no la pides? ¡Te guardamos una!
